Té de Ternura

Hace unos días, llegué a casa justo a la hora de comer y cosa extraña en mi, no tenía nada preparado :( La verdad es que se me antojaba una sopa de pescado, pero la quería al momento, es decir que el hambre me azuzaba de tal manera que lo que más deseaba era tener el plato en la mesa ¡¡¡ya!!! Y me puse a ello de una manera muy práctica. Tenía pescado blanco, mejillones y sepia congelados; (no acostumbro a echar en la olla las proteínas sin descongelar, pero por esta vez si lo hice). Metí en la cacerola un filete grande de fletán, 8 mejillones con su valva, 1 sepia medianita, 1 cebolla y un tomate picad@s, 4 cubos de calabaza sin su piel, ajo en polvo, 1 cdta de cúrcuma, azafrán en polvo, 1 pizca de hierbabuena, 1 de tomillo, 1 de orégano, un par de golpes de molinillo de pimientas y guindilla, 1 cubito de caldo de pescado, agua que cubriera generosamente; lo llevé a ebullición, y le agregué 2 tacitas de arroz integral previamente lavado y escurrido. Dejé que s

¿QUE TAL ESTÁIS? Ya véis que no se necesita ni una isla propia, ni mucho terreno para sentirse en el paraíso; personalmente con mi minúscula terracita me basta para engalanarla con flores, y fotografiar los sencillos platos que preparo. Soy feliz, porque entre otras cosas, cuando termino la "sesión fotográfica", me siento a degustar la preparación del día, y en esta época del año que corre un vientecito ágil y refrescante, me siento muy afortunada de poder disfrutar de mi pequeño, o según se mire GRAN PARAÍSO. Al mediodía, me senté delante de esta ensalada que véis, que anda sobrada de cositas varias que tenía en el frigorífico. La verdad es que la encuentro muy acertada para refrescarnos por dentro ahora que la temporada estival con sus altas temperaturas empezarán a visitarnos; y a la vez si os animáis a prepararla, disfrutaréis de una mezcla de sabores, que os llevarán a rozar el cielo; y cuando se termine, váis a sentir una especie de vacío que o

A veces me apetece preparar una mezcla de hortalizas asadas al horno, con la variedad que tengo en el cajón de la nevera y el congelador. Para ello las pongo en una fuente apta para horno, y las aliño con molinillo de pimientas y chile; hierbas como orégano, albahaca, una pizca de romero, y la sal correspondiente; las riego con un buen aceite de oliva, las mezclo muy bien para que todos los sabores se integren, y las meto en horno precalentado a 200º por espacio de 35-40 minutos. Controlad la potencia del vuestro, porque puede que necesite más o menos cocción.  Mientras las hortalizas se asan, hiervo la cantidad que necesito de arroces de guarnición (Mercadona) en agua, con un ajo, una hoja de laurel, cebolla seca (de tarrito) y sal; dejando que se haga por espacio de 18 minutos que es lo que marca el fabricante en el envase. Una vez hervido, escurro la poca agua sobrante, y lo pongo en el plato a servir con la guarnición de las hortalizas asadas. Lo riego

Mis queridos amig@s; sino queréis trabajar en fin de semana para poner en la mesa una cena digna y sabrosa, aquí tenéis una muestra de lo que puede ser un festín para 1...2...3...4...5... personas o una multitud. Para servirlo con un poco de fantasía; podéis envolver su centro doblando una servilleta de papel de colores vivos, atándola alrededor del pan con un cordelito a juego. Si tenéis invitados podéis acompañarlo con una tabla de quesos varios, unas aceitunas al gusto, y terminar la cena con algo dulce; como unos taquitos de membrillo de calidad, unos dátiles en rama y orejones de albaricoque o melocotón, uvas pasas doradas,  unas nueces y avellanas, y un poco de vino dulce moscatel. Os aseguro que salvo excepciones, todo el mundo va a quedar contento, y vosotros no habréis empleado demasiado tiempo en la cocina, y si en cambio para relajaros y poneros atractivos. Un vino Lambrusco rosado, puede ser un buen acompañante; o incluso un Riesling bien frío. Con

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Cuando estaba preparando las flores para hacer las fotos, cayó un chaparrón con granizo tan arrasador, que me mojó la cámara, el plato, y todo lo que estaba encima y alrededor de la mesa,    incluída yo jaja; así que tomad la buena voluntad. Pués si amigos querid@s; aunque no me lo quiera creer porque mi sentimiento en lo más profundo   sigue siendo el de una niña, hoy cumplo 66 años. La verdad es que nunca he pretendido esconder mi edad; si acaso lo he hecho con gente cercana, ha sido "jugando" a descubrirla, porque hay muchas personas que cuando les digo el número completo se asombran y me dicen que no parezco tener tantos años. Y es que salvo momentos durillos, (que los hay desde luego); me siento feliz; me cuido, y eso cuenta. Para mi, cumplir aniversario es sinónimo de VIDA; y vivir en si, es un regalo diario que ayuda a aceptarnos, a crecer a través de las pequeñas cosas y del contacto con el prójimo, que al fin y al cabo y con sus lecciones, es