PECHUGA DE PATO AL HORNO (Especial San Valentín 2017)

Compré esta pechuga congelada en Lidl; la dejé dentro del refrigerador descongelando toda una noche, y media hora antes de comer la puse a dorar en el horno según instrucciones del fabricante; es decir en bandeja resistente, previamente salpimentada y con la piel hacia abajo sin agregar nada de aceite porque el pato es una carne muy grasa, y con el horno precalentado a 180º calor arriba-abajo termoventilador 15 minutos por lado. Bajo mi parecer, reduciendo un par de grados la temperatura, y con 8 minutos al darle la vuelta hubiera bastado, pero por querer hacer las cosas bien, no salieron como debían.

Amig@s, si hubiera hecho caso a mi intuición, la pechuga hubiera quedado tierna; condición indispensable para degustar este tipo de carne; pués algo me decía que era demasiado tiempo de cocción; y así fué, al cortar la pechuga vi que se había hecho demasiado; ya sabéis que el magret debe quedar rosado por dentro para apreciar una carne suave y sabrosa; pero en fin ahí os lo dejo, y todo hay que decirlo; estaba buenísimo, y junto a un poco de jalea de frutos rojos y un flan de arroz en forma de corazón, lo disfrute mucho.
Y también decir que la calidad de la carne al descongelar era perfecta y muy agradable a la vista como si fuera recién cortada; y salieron dos pechugas que al estar congeladas no se apreciaban y parecía una.

Este puede ser un segundo plato para la fiesta de SAN VALENTÍN; ahí os lo dejo.

Preparación y Fotos para este blog: Conxita