MENÚ PARA EL FIN DE SEMANA: Pasta sin gluten con sofrito de cebolla, champiñones y espinacas. Pollo marinado frito. POSTRE: Yogur con pedazos de albaricoque.

agosto 18, 2022

CLARA: Mitad refresco de naranja con gas y mitad cerveza sin alcohol (yo le saco parte del gas batiendo bien con cucharilla de silicona)

Hoy os dejo estos platos que no os van a dar mucho trabajo, y que están realmente ricos, para poder dedicar el tiempo a otros menesteres en fin de semana.

Por un lado el plato de pasta; en mi caso unas espirales (quise experimentar sin gluten, pero he de deciros que personalmente y dado que no soy celíaca, prefiero el sabor y la textura de la pasta de toda la vida, porque la encontré un pelín dura a pesar de seguir al pié de la letra el tiempo de cocción que marcaba el fabricante).

Para prepararla, preparé un sofrito con aceite de oliva en sartén, y media cebolla blanca triturada en picadora, y cuando empezaba a dorar, añadí unos champiñones límpios laminados.

Cuando llevaban 10 minutos de cocción con la sartén cubierta y el fuego moderado, los aderezé con pimentón dulce de La Vera, hierbas provenzales, sal, y un poco de pimienta negra.

Dejé que se fusionara todo 5 minutos, y en ese momento agregué unas espinacas baby, cocinándolo todo 5 minutos más mezclando continuamente hasta ver las espinacas cocinadas.

Una vez hervida la pasta, mezclé todo, y serví el plato caliente.

MUY RICO :))))

De segundo puse unas supremas de pechuga de pollo marinado un par de horas en el frigo, con hierbas y pimientas de colores, y un chorrito de limón; y calentando aceite de oliva, las enhariné con maicena y las freí unos 4 minutos por lado hasta verlas doradas, echándoles un poquito de sal fina en los últimos minutos.

ESTABAN DIVINAS, MUY TIERNAS Y SABROSAS.

POSTRE:

Creo que en toda mi vida he comido muy pocos helados, entre otras cosas porque encontrar uno que lleve unos ingredientes totalmente naturales, sin grasas nocivas ni emulgentes conservantes ni sabores artificiales, y en el punto justo de azúcar, es muy difícil de encontrar a no ser que te vayas a una heladeria de confianza o italiana, que normalmente trabajan con productos de calidad, y eso se nota en el sabor y en el precio.

Pero reconozco que son deliciosos aúnque no sean del todo recomendables, y me guío porque después de degustar uno de esos últimos, la cabeza se me embota y me siento pesada, parece como si mi colesterol que siempre está a raya, subiera con una rapidez exagerada y hasta el día siguiente no recuperara la normalidad.

Así que como siempre intento encontrar un sustituto que sea más ligero, moderadamente azucarado y que después de pasar el código de barras por la aplicación YUKA, me diga que su puntuación es excelente, y sepa que lo que estoy comiendo no es pura grasa saturada.

Y este es el caso del yogur con pedacitos de fruta que os muestro, que aparte de ser una delícia tiene una puntuación de 10, y sabes que puedes comerlo sin culpa, porque su sabor parece al de un helado.